La fuerza que te impulsa hacia adelante se entrena… y los multisaltos son la clave.
Cuando pensamos en fuerza para correr, lo primero que viene a la cabeza suelen ser las sentadillas o el gimnasio. Sin embargo, el trabajo de multisaltos es una herramienta potentísima para mejorar la fuerza en desplazamiento horizontal, clave para corredores de fondo, medio fondo e incluso velocistas.
¿Qué son los multisaltos?
Son secuencias de saltos repetidos, ejecutados de forma continua, que pueden ser:
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A pies juntos
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Alternos (tipo skipping largo)
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Con una pierna
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Combinados (distintas variantes en un mismo ejercicio)
En ellos, el objetivo no es solo saltar alto, sino proyectarse hacia adelante aprovechando la fuerza de cada impulso.
Beneficios para corredores
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Mejora de la fuerza elástica y reactiva
Desarrollan la capacidad del músculo-tendón para almacenar y liberar energía rápidamente, fundamental para cada zancada. -
Potencia horizontal específica
La orientación del impulso es hacia adelante, lo que transfiere mejor a la mecánica real de carrera que los saltos puramente verticales. -
Economía de carrera
Al reforzar la musculatura extensora de cadera, rodilla y tobillo en patrones dinámicos, se reduce el gasto energético por zancada. -
Coordinación y técnica
Ayudan a mejorar la postura, el braceo y la colocación del pie al contacto con el suelo. -
Prevención de lesiones
Fortalecen tendón de Aquiles, fascia plantar y musculatura estabilizadora, haciéndolos más resistentes a cargas repetitivas.
¿Cómo integrarlos?
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1 o 2 sesiones/semana en pretemporada o bloques de fuerza.
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Volumen progresivo: empezar con 3–4 series de 20–30 m y aumentar.
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Superficie: césped o pista sintética para reducir impacto.
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Técnica primero: prioridad a la ejecución antes que la distancia o la potencia.
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